Come lento, come menos
Audio de la clase:
Muchos estudios muestran que la gente que come rápido tiene un peso mayor (en promedio) que la gente que come lento.
Más aún: la gente que aprende a comer más lento termina perdiendo peso. Solo por eso. Sin cambiar nada más.
Pero, ¿cómo puedes saber si comes más rápido o más lento de lo que deberías? ¿Y qué tanto más lento tienes que comer para que realmente haya una diferencia importante?
Beneficios de comer más lento
Pierdes peso
Cada vez más estudios confirman que solo el hecho de comer más lentamente te hará consumir menos calorías. De hecho, comer más lentamente puede servirle a alguien para adelgazar hasta 10 kilos en un año sin tener que hacer nada más de manera diferente o comer algo diferente.
En un estudio se observó lo que ocurría si se les pedía a un grupo de estudiantes tardarse el doble de tiempo de lo que se tardan normalmente con una comida. En un día se les hizo comer y que monitorearan su tiempo "normal". En otro día, se les pidió que duplicaran ese tiempo. Los investigadores encontraron que aquellos estudiantes que habían comido cantidades mucho mayores el primer día terminaban comiendo hasta 40% menos calorías cuando se les pedía que comieran más lentamente.
La razón es la que ya conoces: el cerebro necesita como unos 20 minutos para registrar que ya estamos llenos. Si comemos muy rápido, vamos a seguir comiendo aunque estemos llenos, simplemente porque no hemos dado tiempo a que nuestro cerebro se dé cuenta. Si comemos lentamente, tendremos tiempo de darnos cuenta de que estamos llenos, y podremos parar a tiempo.
Disfrutas más de lo que comes
Es difícil disfrutar la comida si te la zampas sin siquiera pensarlo. De hecho, podrías disfrutar enormemente y sin una pizca de culpa el comer alimentos que consideras menos sanos si los comes lentamente, pues en ese caso será más fácil comer solo un poquito.
Ya sea algo engordoso o algo saludable, si comes los alimentos que más te gustan no tiene sentido comerlos rápido... lo mejor es comer lentamente y disfrutar cada bocado ¡como si fuera el último! Así cada una de tus comidas será todo un placer.
Tienes mejores digestiones
Si comes más lentamente vas a masticar tu comida mejor, y eso hará que digieras mejor. Recuerda que la digestión comienza en la boca (la saliva contiene enzimas digestivas), así que mientras más adelantes el proceso allí mejor se darán las cosas al llegar al estómago.
Además, recuerda que tu estómago no tiene dientes... (sí, ya sé, suena raro). Mientras más tritures los alimentos antes de tragar, mejor podrás aprovechar los nutrientes que estos te proveen. Y con todo esto, también tendrás menos problemas digestivos a la larga.
Adicionalmente, concentrarte en tu masticación te ayudará a estar más consciente de lo que comes.
Disminuyes tu estrés
Comer lentamente y prestar atención a lo que se come resulta ser un excelente ejercicio de meditación. Toma tu tiempo para vivir el momento, en lugar de andar siempre a las carreras pensando en lo que vas a hacer después.
Cuando comes, haz eso: come, y no pienses en nada más. Esto te hará detenerte un poco en el correr del día, y ayudará a disminuir tus niveles de estrés (y mientras menos estrés tengas más fácil adelgazarás).
Cómo comer más lento
¿Qué aprendimos hoy?
Lo que debes hacer hoy:
1
Ya debes haber realizado algunas observaciones sobre tu forma de comer, y es hora de establecer detalladamente cuál será tu hábito de estas semanas
Ve a la Comunidad de TNC y coméntanose allí en qué consiste tu hábito personal y cómo planeas aplicarlo. También lo puedes documentar en tu Diario de Avances.
2
¿Qué tan lento (o rápido) comes?
¿Usas alguna de las estrategias que mencionamos para comer más lentamente? ¿Conoces alguna otra? ¿Cuál de esas estrategias comenzarás a aplicar para ayudarte a aprovechar mejor el momento de tus comidas y comer más lentamente? Cuéntanos en la Comunidad de TNc (en la App).